La esperanza de vida de los brasileños pasó de 75,8 a 76 años de 2016 a 2017, un aumento de tres meses y 11 días. La cifra fue publicada este jueves (29) por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
Según la encuesta, la esperanza de vida aumentó de 72,2 años en 2016 a 72,5 años en 2017 entre los hombres y de 79,4 a 79,6 años entre las mujeres.
El científico del IBGE, Marcio Minamiguchi, indicó que es probable que Brasil se alinee con los países desarrollados. “Tenemos una cierta cantidad de grasa que quemar cuando se trata de la esperanza de vida. En Brasil, tendemos a converger hacia el nivel de los países desarrollados, que están cerca de los 83 años. Todavía queda un largo camino por recorrer, pero si pensamos que algunos países están en el rango de 50 años, vemos que estamos más cerca de este nivel superior”.
Es probable que la expansión sea cada vez más lenta, dijo Minamiguchi, ya que el salto observado en el pasado se debió a una fuerte reducción de la mortalidad infantil.
“Al principio, la mejora fue posible gracias a una menor tasa de moralidad entre los jóvenes, debido a la propia naturaleza de las muertes. Es algo que no requiere grandes avances tecnológicos, como la conciencia de que a los niños se les debe dar agua potable”, agregó.
En los últimos 77 años, la esperanza de vida promedia del brasileño se incrementó 30,5 años. Según datos del IBGE, en 1940, la esperanza de vida era de 45,5 años –42,9 años para los hombres y 48,3 para las mujeres–.
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