A petición del presidente Michel Temer, el ministro de Integración Nacional reunió este fin de semana a un equipo para inspeccionar los lugares afectados por los deslizamientos de tierra provocados por las fuertes lluvias que azotan Niterói, estado de Río de Janeiro. Quince personas murieron.
“El presidente Temer nos ha orientado a brindar toda la ayuda necesaria a las familias y a los agentes civiles. El gobierno federal no escatimará esfuerzos para mitigar el impacto de esta tragedia y el sufrimiento de las personas afectadas”, declaró el ministro Pádua Andrade.
Accidente
Las víctimas quedaron enterradas en la madrugada del sábado (10) después de que una gran roca se rompió y rodó desde lo alto de la favela Morro da Boa Esperança, provocando un masivo deslizamiento de tierra. Varias viviendas y árboles recibieron el impacto.
De acuerdo con el Departamento de Bomberos, 11 personas heridas fueron rescatadas vivas y varias casas fueron acordonadas por la Defensa Civil de la ciudad. Más de 200 profesionales se sumaron a las tareas de búsqueda y de socorro a las víctimas del desastre.
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