Con la presencia del presidente Jair Bolsonaro, Brasil asumirá la presidencia pro tempore del Mercosur el 17 de octubre, en Santa Fe, Argentina, durante una reunión de los jefes de Estado del bloque.
La participación de Bolsonaro en la 54.ª reunión del Consejo del Mercosur y países asociados estará precedida por una serie de reuniones entre funcionarios de gobierno y diplomáticos, en las que se discutirán medidas para reducir la burocracia en las relaciones comerciales e institucionales entre los países miembros del bloque y otros países.
Celebración
La delegación brasileña estará encabezada por el canciller Ernesto Araújo, quien participará en las reuniones preparatorias de la cumbre el 16 de enero para celebrar la firma del acuerdo del bloque del Cono Sur con la Unión Europea (UE).
En Santa Fe también se celebrarán reuniones preparatorias los días 14 y 15 de julio, con una reunión de la Comisión de Comercio del Mercosur y un debate sobre el funcionamiento de un mercado común.
En la presidencia del Mercosur, la delegación brasileña pretende seguir los pasos de Argentina, que es el actual líder pro tempore del bloque y que, en esta condición, presidió con éxito las negociaciones con la Unión Europea.
Simplificación
Actualmente, en el ámbito del Mercosur, existen más de 200 organismos, consejos y comisiones, factor que presiona los presupuestos de Brasil, Paraguay, Argentina y Uruguay, los países que conforman el bloque.
Bajo la presidencia pro tempore de Brasil, los miembros del Mercosur evaluarán el funcionamiento y el objetivo de cada órgano o consejo, que se extinguirán si hay pruebas de que no tienen utilidad práctica.
Arancel Externo Común
Según miembros de la delegación brasileña, Brasil trabajará para reducir los Aranceles Externos Comunes (AEC) que se aplican en la comercialización de productos entre los miembros del bloque. Los AEC fueron creados al inicio del Mercosur para proteger la industria de cada país y evitar así el monopolio de la producción. Sin embargo, con el tiempo, los AEC han contribuido a que el Mercosur se convertiera en un bloque de países cerrados y reacios al comercio mundial.
La firma del acuerdo con la UE permitirá, según la delegación brasileña, que esos aranceles se reduzcan para que el comercio en la región iguale las condiciones del bloque europeo.
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