En un mensaje publicado la noche del lunes (7) en sus redes sociales, el presidente brasileño Jair Bolsonaro afirmó que el Marco Jurídico de las Telecomunicaciones, sancionado el pasado jueves (3), amplía el acceso a Internet en Brasil al llevarla a lugares donde la inversión en banda ancha es poco rentable.
Según la nueva ley, las empresas que adquieren el derecho a explotar la infraestructura de red pueden pasar a un régimen con menos obligaciones, a través de autorizaciones. Esas empresas tendrán que realizar inversiones destinadas a ampliar y mejorar la infraestructura y la calidad del acceso de banda ancha. Los compromisos de las empresas darán prioridad al despliegue de redes de comunicaciones de datos de alta capacidad en zonas remotas. También se les obligará a seguir prestando servicios de telefonía fija en las zonas más remotas.
Además, a las empresas que explotan bandas de frecuencias ("espacios" en el espectro electromagnético utilizados, por ejemplo, para la transmisión de señales de radio y televisión, telefonía celular, servicios por satélite e internet móvil) se les permitirá comerciar "partes" de estas bandas, creando así lo que se ha denominado el "mercado secundario de espectro". La empresa pagará por la explotación y podrá hacer negocios con parte de este "espacio".
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