El presidente Jair Bolsonaro declaró este martes (26) que el gobierno federal apoya la iniciativa de los empresarios de importar vacunas contra la COVID-19 por su propia cuenta para inmunizar a sus empleados. La declaración fue hecha durante una videoconferencia en un seminario sobre inversiones en América Latina, celebrado por el banco Credit Suisse.
"El gobierno federal está a favor de que este grupo de empresarios lleve a cabo su propuesta de importar la vacuna a coste cero para el gobierno federal, con el objetivo de inmunizar a 33 millones de personas. De cualquier manera que esta propuesta pueda avanzar, estaremos estimulando porque, con 33 millones de dosis gratuitas, ayudaría mucho a la economía y a que los que quieran vacunarse estén libres del virus", dijo Bolsonaro.
El presidente explicó que el gobierno fue contactado la semana pasada por empresarios para importar 33 millones de dosis de la vacuna de Oxford.
De ese total, la mitad se incorporaría al Sistema Único de Salud (SUS) y se pondría a disposición de la población según los criterios del Ministerio de Salud, y la otra mitad sería utilizada por las empresas según sus propios criterios. Según el presidente, el gobierno firmó una carta de intención a favor de la medida.
"Ya somos el sexto país que más vacunó en el mundo, pronto estaremos en los primeros lugares, para darle más comodidad y seguridad a todos, de modo que nuestra economía no deje de funcionar", dijo, señalando que el gobierno promulgó una medida provisional el año pasado, en la cual destinaba US$ 20 mil millones para la compra de vacunas.
Atracción de inversiones
Durante su discurso, Bolsonaro reafirmó su compromiso con el límite de gasto público y dijo que el gobierno quiere acelerar las privatizaciones y las reformas para incentivar y facilitar el trabajo de la iniciativa privada en la recuperación de la economía tras la crisis generada por la pandemia de COVID-19.
"Mantendremos nuestro compromiso con la regla del techo de gasto como ancla de sostenibilidad y credibilidad económica. No vamos a dejar que medidas temporales relacionadas a la crisis se conviertan en compromisos permanentes de gastos. Nuestro objetivo es avanzar de una recuperación basada en el apoyo al consumo a un crecimiento sostenido por el dinamismo del sector privado", dijo.
Según el presidente, el trabajo desarrollado por el gobierno tiene como objetivo atraer inversiones extranjeras directas, especialmente para proyectos prioritarios en el área de infraestructura.
"Queremos acelerar las subastas de concesiones y privatizaciones, especialmente en el marco del Programa de Asociación para Inversión (PPI), que cuenta con una cartera de proyectos estratégicos a largo plazo, de bajo riesgo y con tasas de rentabilidad atractivas y estables", subrayó.
Cambios
Además, Bolsonaro afirmó que entiende los problemas estructurales de la industria brasileña y mundial y aseguró que se compromete a realizar cambios en este sector "con un pensamiento estratégico y la redefinición de vínculos de las cadenas productivas mundiales".
La agenda de reformas en el Congreso Nacional y el ascenso de Brasil a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) también siguen siendo prioridades en la agenda del gobierno federal, según el mandatario.
"Seguiremos defendiendo la amplia competencia, el libre comercio, la modernización del Estado, los valores democráticos y la lucha incansable contra la corrupción. Ya estamos viendo reflejos muy positivos y contamos con el apoyo de la iniciativa privada para consolidar un nuevo ciclo de desarrollo y prosperidad en nuestro país. Contamos con nuestros esfuerzos para seguir la senda de la apertura económica y facilitar el comercio y la inversión", dijo.
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