El presidente Jair Bolsonaro fue dado de alta en la mañana del domingo (18) y habló con los periodistas a la salida del Hospital Vila Nova Star, en São Paulo, donde se sometió a un tratamiento por obstrucción intestinal.
Durante la entrevista, Bolsonaro dijo que volverá a trabajar en la Presidencia en la mañana de este lunes (19) y se reunirá con el ministro de Salud, Marcelo Queiroga, para tratar el tema del covid-19.
“No dejé de trabajar aquí. Hablé con varios ministros, les di varias tareas. Mañana le hablaré a Queiroga sobre el tema del covid. Tuve acceso a un estudio del CDC, el Centro de Estudios de Enfermedades de los Estados Unidos, y lo que más mata por covid, en primer lugar, son los que son obesos. En segundo lugar, los que están abrumados por el miedo o el pánico. Recuerden que dije hace un tiempo que hay que enfrentar, no hay manera. Para quien está con pánico o con temor, la posibilidad de evolucionar a un empeoramiento muy grave es muy grande”, dijo.
El presidente dijo que también tiene la intención de tratar con Queiroga sobre el uso del fármaco proxalutamida contra el covid-19. Informó que solicitará estudios en el país sobre el medicamento.
Bolsonaro también habló sobre la reunión con los jefes de los Tres Poderes, pospuesta debido a su hospitalización. Dijo que la reunión deberá celebrarse y que "no hay nada anormal" en estos encuentros, que sirven para "arreglar algunas cosas, intercambiar ideas".
Hospitalización
El mandatario dijo que quería irse desde el primer día que fue hospitalizado y que espera “en un par de semanas estar comiendo una costilla a la barbacoa". “Por lo demás, la lucha continúa, Brasil está ahí y tenemos mucho que resolver.”
Tras el alta, además del seguimiento médico, el presidente tendrá que seguir una dieta. Bolsonaro admitió, sin embargo, que es un “pésimo ejemplo cuando se trata de hacer dieta”.
El presidente ya ha regresado a Brasilia.
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