El Índice Nacional de Precios al Consumo (IPCA), que mide el reajuste en los precios para familias con ingresos entre 1 y 40 salarios mínimos, subió un 0,96% en julio, el nivel más alto para ese mes desde 2002, cuando alcanzó el 1,19%.
Los datos fueron publicados este martes (10) por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
En lo que va del año, el indicador acumula un alza del 4,76% y, en 12 meses, del 8,99%, manteniéndose por encima del registrado en los 12 meses inmediatamente anteriores (8,35%).
Según el IBGE, ocho de los nueve grupos encuestados mostraron un aumento en el mes. El mayor impacto se debió al aumento del 3,10% en la vivienda, que se vio presionada por la subida del 7,88% en la energía eléctrica.
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